Aburrirse

 

La kryptonita es a Superman como el aburrimiento es a las Altas Capacidades.

 

La RAE define el aburrimiento como el cansancio del ánimo originado por falta de estímulo o distracción, o por molestia reiterada.

 

 

Y no puede ser más acertada: «cansancio del ánimo»

 

 

Aburrirse no significa que uno no tenga nada que hacer, ya que se puede estar sin hacer nada y disfrutar plenamente de ello. Aburrirse tiene que ver más con la apatía, la desgana, la desmotivación y frustración que se siente por no ser capaz de interesarse por nada, o por hacerlo tan sólo durante un corto espacio de tiempo.

 

Siempre se habla del aburrimiento que sufren los niños con Altas Capacidades en el colegio, de éste como causa principal de su fracaso escolar, producto de un sistema educativo que no está a la altura.

 

En el artículo «Me aburro» de «La Rebelión del Talento» lo exponen tan maravillosamente bien que yo no voy a entrar en este análisis, sino en uno un poco más personal, el que afecta a los adultos superdotados, los grandes olvidados de las Altas Capacidades.

 

Los adultos superdotados sufren en muchas ocasiones de un profundo aburrimiento, causado por una falta de estímulos que no han sabido crear en su vida.

 

Por supuesto esto no es café con leche para todos, habrá quien haya sido capaz de construir una vida rica en matices y vivencias, a la altura de una personalidad arrolladora. Sin embargo, es habitual encontrarnos a adultos con altas capacidades que no han logrado desarrollarse plenamente ni a nivel intelectual ni a nivel emocional, y se sumergen con frecuencia en la apatía y la desgana.

 

Se sienten en el trabajo como antaño en el colegio, desmotivados, diferentes e incluso aislados. Su dificultad para relacionarse no favorece el entendimiento con sus compañeros y superiores, su baja autoestima les impide intraemprender asumiendo que sus propuestas no estarán a la altura y su miedo al fracaso les inmoviliza impidiendo el cambio.

 

Con los amigos de toda la vida se sienten un fraude. No se muestran tal y como son porque nunca lo han hecho. Éstos tienen una visión totalmente distorsionada de ellos y no notan su vacío. Cada vez con más frecuencia se refugian en sus pensamientos y se aíslan.

 

Y en ocasiones sufren crisis existenciales causadas por esa visión amplia del espacio y el tiempo. Viven en el hoy pero piensan en el mañana, y en el pasado mañana, y en el día siguiente, y así hasta alcanzar una línea temporal que supera con creces varias generaciones. Es difícil estar motivado cuando crees saber cómo va a ser tu vida y la de la humanidad en los próximos años.

 

 

Uf…

 

 

La verdad es que enfocado de este modo cualquiera diría que ser un adulto con altas capacidades es una maldición… pero no, no lo es.

 

Esto pasa, realmente pasa, pero tiene solución. Nada es imposible con la actitud y el conocimiento adecuados.

 

El primer paso es confirmar las Altas Capacidades, algo fundamental. Quienes ya lo saben comprenden lo importante que es saber quién eres y por qué eres como eres. Es el mejor de los comienzos.

 

 

Pero volvamos al aburrimiento y a cómo vencerlo.

 

 

Para vencer ese aburrimiento en tu trabajo, en tu vida personal o en tu interior no hay mejor fórmula que aprender.

 

 

APRENDERLO TODO 

 

 

  • Aprende sobre tí mismo, sobre cómo funcionas, sobre cómo eres. Conocerte realmente, sacar a la luz tus virtudes y tus defectos, tus fortalezas y tus debilidades, te permitirá potenciar las unas y mejorar las otras.

 

  • Aprende sobre tu trabajo, el que tienes o el que quieres tener. La formación continua es imprescindible en nuestros días así que haz de tí un profesional excelente, alguien a quien tu empresa o el mercado valore realmente. Invierte en conocimiento, invierte en tí.

 

  • Aprende a aceptar a los demás. Sé comprensivo ya que no todo el mundo tiene que pensar y sentir como tú. Pese a que te gustaría que tus amigos de toda la vida conocieran quién eres en realidad, acepta que es posible que ellos no sientan ningún interés. No todo el mundo se preocupa por estas cosas.

 

  • Aprende a estar desocupado. No hacer nada no significa aburrirse. No hacer nada te permite estar contigo mismo, con tu familia y amigos. No todo aquello en lo que ocupas tu tiempo tiene por qué ser instructivo, a veces, sencillamente, sólo se trata de estar. El contacto humano es necesario, es sano. No lo infravalores.

 

 

Y aprende a desaprender

 

 

Esto es quizás lo más complicado. Aprender a desaprender significa que respecto a algunas cosas deberás resetearte y empezar de cero.

 

Si en tu trabajo no te sientes realizado quizás también es culpa tuya. Trata de mejorar aquellas cosas que no te gustan, sal de tu zona de confort y dirígete hacia el cambio.

 

Si con tus amigos te sientes un extraño actúa con franqueza y muéstrate como eres. Confía en ellos y no los juzgues.

 

Si vives una crisis existencial y la vida te aburre, valora lo que tienes. Disfruta de la vida, del día a día sin obsesionarte con el futuro que todavía está por llegar. Aunque creas que sabes cuál va a ser, no es cierto. Si tú cambias, tu vida cambia, y por tanto el futuro también cambia.

 

 

Al igual que Superman, lucha.